Río Secreto La serpiente más grande de México, es también una de las más hermosas y conocidas. Su nombre científico es Boa constrictor y fue descrita hace 255 años por el naturalista Carl Linnaeus.
Vive desde la península de Baja California, las vertientes Golfo y Pacífico de México, hasta Argentina y algunas islas del Caribe. Es una serpiente grande y poderosa que puede llegar a medir hasta 4 metros de largo y pesar hasta 27 kilos. Pertenece a una Familia muy antigua llamada Boidae que conserva vestigios de caracteres primitivos, como un par de ganchos que asoman entre las escamas cerca de su cola y que son reminiscencias de cintura pélvica, donde alguna vez hubo patas.
Se alimentan de una forma muy particular. Salen en búsqueda de sus presas que generalmente son animales homeotermos (llamados de sangre caliente), es decir: mamíferos pequeños y medianos, así como aves.
Los localizan gracias a la vista y el olfato, ayudados por su lengua que capta partículas pesadas de olor y las lleva a un órgano especial llamado vomeronasal o de Jacobson. También cuentan dos hileras de fosetas termorreceptoras, pequeños orificios escondidos bajo las escamas a cada lado de su rostro. Gracias a ellas, son capaces de percibir el calor de sus presas.
Una vez que la han localizado y sigilosamente se han acercado lo suficiente, la Boa lanza un ataque a gran velocidad sujetando con sus más de 60 dientes al infortunado animal. Inmediatamente lo rodea con su musculoso cuerpo y aprieta con fuerza, cada vez que el animal exhala, la Boa aprieta un poco más y así hasta que la mata por asfixia.
A pesar de lo artero de su ataque, las boas son animales dóciles que difícilmente agredirán a algo que no es su presa, por lo que son muy solicitadas para tener como "mascotas" y exhibirlas para fotografía, prácticas que generalmente son nocivas pues se fomenta el comercio ilegal y en la mayoría de las ocasiones, las personas no cuentan con los conocimientos adecuados para brindar las necesidades y requerimientos básicos de estos animales, por lo que son propensos a enfermar y morir en cautiverio.
En los lugares que habitan, son eficaces controladores de plagas de roedores. En su juventud acostumbran escalar las ramas de los árboles, conforme crecen y se vuelven más pesadas tienden a ser más de hábitos terrestres. Las hembras son más grandes y robustas que los machos, dan a luz hasta 65 crías vivas.
El hermoso patrón de su piel es único para cada individuo, algo así como nuestra huella dactilar.
A lo largo de su distribución recibe muchos nombres comunes como ilamacoa (serpiente vieja) o mazacuata (serpiente venado) en náhuatl. En maya, la boa recibe varios nombres como Och-kan y K'axab yuc y es bastante común en las representaciones artísticas y culturales de la mayoría de los pueblos mesoamericanos.
Esta especie se encuentra dentro del apartado I de la convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestre (CITES) y está dentro de la norma oficial NOM-059-semarnat-2010, por lo que se requieren documentos especiales para su posesión y venta.
Es uno de los habitantes de la Reserva Natural Río Secreto y aunque difícilmente puede ser vista debido a sus hábitos nocturnos, afortunadamente aún ronda en esta increíble selva.
Y tú, ¿Qué más nos puedes contar sobre la Boa constrictor?
